Para enfrentar situaciones de discriminación sexista tanto en ámbitos laborales como en otros ámbitos sociales, las mujeres pueden recurrir a organismos de defensa de los Derechos Humanos, Secretarias de Género, ONGs, dispositivos locales, agentes garantes de derechos, abogados especializados en género, líneas gratuitas, oficinas de género del municipio, asistentes sociales, psicólogas, Centros de Atención Primaria de la salud e incluso Organizaciones feministas para informarse y accionar de acuerdo a cada caso en especifico. Empoderarse es la opción mas saludable para poder defender sus derechos y dignidad ante situaciones de violencia por discriminación sexista que tienden a naturalizar los roles estereotipados que oprimen la vida de las mujeres en todos los ámbitos en que se desarrolla su vida.