Para el diseño del proyecto de ayuda humanitaria que se propone habría que tener en cuenta los siguientes factores:
1. Análisis del contexto de la comunidad. Es necesario comprender la realidad social, económica, cultural y política que vive esta comunidad. También resulta importante hacer un estudio de la situación geográfica y de cómo podremos movilizarnos y transportar el material que sea necesario hasta la zona debido a la mala comunicación que se describe.
2. Espacio seguro: la creación de un espacio seguro para realizar el proyecto y las respectivas actividades es fundamental, especialmente a la hora de trabajar conjuntamente con mujeres víctimas de violencia de género. La ubicación del espacio, así como la disposición de este será un factor clave a tener en cuenta.
3. Análisis de participación: deberemos analizar los agentes sociales que van a participar activamente en el trascurso del proyecto. En este sentido, será necesario incluir tanto a las mujeres y niñas, como a los propios líderes comunitarios para que el proyecto resulte exitoso. Al tratar temas relacionados con la violencia de género, también será esencial incluir la participación de los hombres y jóvenes en la prevención y sensibilización de la violencia de género. En el análisis de participación hay que hacer hincapié en que deberán estar recogidos todos los grupos sociales que conforman la comunidad, teniendo en cuenta las diferentes edades y sexos.
4. Análisis de los factores que favorecen la violencia de género. Durante las reuniones con los diferentes grupos de la comunidad, tendremos que realizar un análisis de los factores que ellos mismos reconoce y apuntan cuando hablamos sobre la violencia de género.
5. Análisis de los recursos disponibles: es necesario contar con el apoyo de profesionales (médicos, líderes políticos, empleadores/as), así como con el apoyo de instituciones públicas y de otras organizaciones y actores locales que se comprometan con el cumplimiento del proyecto y la continuación de este.
6. Creación de grupos especializados en mitigar la violencia de género. Atendiendo al análisis de participación, trataría de escoger a aquellas mujeres y jóvenes más implicadas que sean las encargadas de recibir formación continua en prevención y mitigación de violencia de género para que puedan desempeñar ellas mismas las acciones que consideren.
7. Cartografía de los puntos vulnerables de VG. Realizar una sesión conjunta con las mujeres para identificar los principales espacios más vulnerables a que pueda producirse una agresión sexual.